KTM está afrontando quizás la peor crisis de su historia y se cierne un interrogante sobre su continuidad en MotoGP. Es así que varios medios ya dan por hecha la salida del gigante austriaco de la categoría reina, ya sea en el próximo año o cuando finalice su contrato con Dorna Sports.
La empresa que funge bajo el paraguas del Pierer Mobility Group se declaró en concurso de acreedores para evitar la bancarrota. Con una deuda estimada en más de 3.000 millones de euros, la marca trabaja contrarreloj para cumplir con las condiciones impuestas por sus acreedores.
No esperar a la finalización del contrato
El plan de reestructuración de la empresa ya fue presentado y deberá ser votado por los acreedores el próximo 25 de febrero de 2025. Según un informe de la Asociación de Acreedores Alpinos (AKV), una de las medidas consideradas en el plan de reorganización es la salida «planificada» de KTM de MotoGP. Esto incluiría a la categoría reina, a Moto2 y Moto3. El ahorro simbolizaría un total de 46 millones de euros según un análisis de Boston Consulting Group.
Aunque significaría un gran ahorro económico, esto perjudicaría su imagen y futuras estrategias como marca. Asimismo, esta incertidumbre alcanza a sus pilotos, siendo que todos poseen contratos multianuales como Brad Binder, Pedro Acosta, Maverick Viñales y Enea Bastianini.
Por otro lado está el acuerdo que mantiene KTM con la organizadora de MotoGP, Dorna Sports, y que llega hasta 2026. Desde la gerencia anticipan un «perjuicio significativo en las relaciones públicas si se abandona MotoGP de manera prematura».
Un informe inicial de la audiencia de acreedores reveló que varias partes estarían interesadas en inyectar un capital combinado de 700 millones de euros en KTM. Esta inversión es fundamental para que la empresa cumpla con su cuota de reembolso de deuda del 30%. Las ofertas podrán presentarse hasta la tercera semana de enero. Allí entra en juego la aparición de distintas inversiones, como lo fue hace un par de días la mención de Lewis Hamilton.
De esta forma, las próximas semanas serán claves para decidir si la casa austriaca se queda en el Mundial de Motociclismo o si lo abandona definitivamente.