El test de Valencia de MotoGP marca un antes y un después en Yamaha. Muchos cambios arriban en torno al estatus de la marca de los diapasones en el circuito Ricardo Tormo. Desde la primera toma de contacto como piloto de Toprak Razgatlıoğlu al debut propiamente dicho del motor V4 y varias cosas más, se trata de un día clave en torno a la competitividad de la marca.
Se mantienen las concesiones
Con lo hecho por Luca Marini en el último GP del año, Honda se retiró del rango «D» de las concesiones, por lo que Yamaha es, ahora, el equipo con peor desarrollo de MotoGP. No es de sorprender; a pesar de las grandes poles de Fabio Quartararo, la empresa nipona no acumuló buenos resultados para retirarse, por lo que se mantendrá su puesto en el sistema hasta que empiece a, por lo menos, puntuar más en las carreras. Eso le permitirá seguir haciendo pruebas con sus pilotos, así como wild cards y tener acceso a más test privados, algo que, en el momento actual de la marca, no puede dejarse de lado.
El bendito V4
Termina la era de los motores en línea en MotoGP, con Yamaha estrenando su altamente desarrollado propulsor V4 en el test de Valencia. Luego de meses de pruebas y constante retroalimentación, veremos cómo los pilotos Fabio Quartararo, Álex Rins, Toprak Razgatlioglu y Jack Miller tendrán su primera toma de contacto con él.
El problema es que no todos están seguros del debut de esta «nueva moto». «Adiós a este motor, que no sé si es algo bueno o malo. En el test espero disponer de una moto que, al menos, ofrezca las mismas prestaciones que la que dejamos. Si no tiene esta velocidad, será difícil para mí y para Yamaha, porque no hay demasiado tiempo hasta Malasia», subrayó Quartararo, aún escéptico y, de quien sabemos, su futuro depende de este desarrollo.
El debut de Toprak
Si bien la atención está en el V4, también está sobre Toprak Razgatlıoğlu. El tricampeón de WSBK estará sobre la pista con todos sus rivales de la próxima temporada. Cabe recordar que llevó a cabo un test privado hace una semana en Motorland Aragón, donde probó la M1 del equipo Prima Pramac, que lo acompañará durante el 2026. Clave será que el turco aproveche al máximo tanto este test como el de Shakedown Sepang en enero, si es que quiere ser competitivo desde el primer día de la temporada que viene.
