En 2017 Saroléa lanzó la SP7 creada íntegramente para los circuitos, que pudo competir en el mítico Tourist Trophy de Isla de Man, en la categoría TT Zero. Sobre esa misma base, la empresa fundada en 1850 en Herstal (Bélgica), presentó la MANX7, una variante pensada para su utilización en la vía pública, menos radical, pero igualmente exclusiva.
El motor de esta e-bike, uno de los más eficientes del segmento, es refrigerado por aire y puede producir una potencia de 120 kW (163 CV) y un torque de 450 Nm. Además, la firma brinda tres opciones de batería: la de 14 kWh alcanza una autonomía de 230 km, la de 18 kWh que afirma 280 km, en tanto que la de mayor capacidad afirma 22 kWh y puede durar hasta 303 km. Su velocidad máxima es la de una auténtica deportiva: logra alcanzar los 240 km/h (limitada electrónicamente) con un peso de 217 kg en orden de marcha.
Toda la carrocería fue forjada en fibra de carbono, así como el subchasis, el basculante y el chasis estilo monocasco que alberga las baterías y el motor. Por otro lado, las llantas son de aluminio firmadas por OZ, las suspensiones Öhlins y los frenos Beringer.
Estéticamente, mezcla líneas retro con algunos detalles de la nueva escuela, como su minimalista faro delantero. Por el momento, su producción estará acotada a sólo 20 unidades, con un costo que comienza en los 42.975 euros y que varía según la capacidad de sus baterías.