El Gran Premio de Malasia será, sin dudas, recordado por varias cosas. La jornada de competición comenzó marcada por la muerte del joven piloto indonesio, Afridza Munandar, quien falleció el día sábado después de un accidente durante una carrera de la Asia Talent Cup en el mismo circuito de Sepang. De allí que todos los pilotos de la categoría reina dedicaran la misma a Munandar.
En cuanto a lo estrictamente deportivo, la carrera en Malasia se presentaba, en la previa, como una buena oportunidad para el rookie Fabio Quartararo de obtener su primer victoria en el MotoGP, sobre todo a sabiendas de que este circuito suele ser un tanto incómodo para el actual campeón Marc Marquez. Así pareció ser incluso hasta el sábado, cuando el francés se quedó con la pole por delante de Marquez, siendo el más rápido en los entrenamientos libres y además, bajando el récord del circuito a 1:58.5.
Sin embargo, esta vez tampoco pudo ser para Quartararo, quien terminó lejos del podio y tendrá su última chance en esta temporada en Valencia. Quien sí pudo festejar fue Maverick Viñales, quien a bordo de su Yamaha terminaría obteniendo el triunfo por encima de Marquez y de «Dovi», quienes completaron el podio. De esta forma, Viñales pudo dar vuelta la página después de lo que fue su caída en el circuito de Phillip Island.
Otro de los que tuvo una buena jornada fue el italiano Valentino Rossi quien con un séptimo lugar completó lo que, probablemente, sea su mejor carrera en los últimos meses. Aunque vale decir de una forma un tanto paradójica: en Malasia «Il dottore» completó su peor racha con 45 carreras sin triunfos. La última vez que lo hizo fue en Assen, el Gran Premio de los Países Bajos de 2017. Así, se vió a un Rossi que hacía mucho no subía a un podio con opciones reales de lograrlo pero muy lejos de aquel campeón de hace algún un tiempo atrás.
De esta forma se fue la penúltima prueba del Campeonato Mundial de Motociclismo que tendrá su definición el próximo 17 de noviembre en España.