La nueva planta de producción de KYMCO, ubicada en Changzhou, China, fue creada para reemplazar los actuales centros que la marca tiene en esa ciudad y poder elevar la capacidad de fabricación desde las 320.000 unidades hasta las 500.000 unidades, sin desestimar la elaboración de un conjunto de 350.000 piezas al año.
Esta nueva factoría, cuyas obras empezaron en diciembre de 2016, cubre un área de 385 hectáreas con 145.000 metros cuadrados construidos, dispone de 827 equipos de montaje y también de 14 líneas automatizadas. Respecto a la producción, posee 275 equipos avanzados y también un centro de I+D, formado por tres edificios y una gran pista de pruebas en el que se desenvuelven 150 profesionales que realizan test de todo tipo.
«El nuevo centro de Changzhou representa nuestro compromiso en liderar la innovación tecnológica internacional y en superar nuestros elevados estándares de calidad. Es un claro ejemplo del liderazgo de KYMCO en la transformación de la industria de las motocicletas y demuestra el potencial industrial e innovador de la marca», explicó Allan Ko, presidente de la compañía.
Con esa apertura, la marca notificó que espera contar con otras cinco centros de este estilo alrededor del mundo, que se sumarán a otras seis plantas de ensamblaje ubicadas en China, Vietnam, Filipinas y Taiwán (dos). Además, KYMCO destacó la importancia de sus actividades de Investigación y Desarrollo, para las cuales destina el 7% de su producción anual.
