Tras la celebración de la última cita de la temporada 2021 de MotoGP en Valencia, las imágenes de la despedida de Valentino Rossi todavía siguen dando vueltas en las retinas de los fanáticos de todo el mundo.
En Cheste “Il Dottore” puso punto final a una trayectoria de 25 años donde supo conquistar 9 títulos mundiales y ser el único piloto en consagrarse en las categorías de 125cc, 250cc, 500cc y MotoGP. Además a sus 41 años logró un récord de 89 victorias y 199 podios de MotoGP en 432 carreras en total. Números que señalan que hablar de Rossi es hablar de uno de los mejores pilotos de motociclismo en toda la historia.
Sin embargo, a pesar de su importancia, los números no reflejan de forma cabal la relevancia que VR46 tuvo para el desarrollo del Campeonato Mundial de Motociclismo. Esto se debe a que sus aportes fueron más allá de lo que marcan las estadísticas: Valentino Rossi logró llevar a la categoría reina a un nivel que antes no tenía y sentó las bases para su futuro.
Es así que con la despedida de Rossi se cierra una etapa de gloria pero además, con el inicio de la doble jornada de test en Jerez inicia una nueva donde los frutos de todo lo cosechado por el italiano están a la vista.
Deporte de masas
Uno de los grandes aportes que hizo Valentino Rossi al Campeonato Mundial de Motociclismo fue transformarlo en un evento de masas.
Cuando Valentino Rossi debutó en el mundial el vigente campeón del mundo de 500 cc era Mick Doohan y la categoría no era lo que es actualmente.
En aquella temporada 1996 Rossi corrió en Malasia, pero en el circuito de Shah Alam, corrió en Indonesia, pero en Sentul, corrió en Japón, pero en Suzuka, corrió en Francia, pero en Paul Ricard, corrió en Alemania, pero en Nürburgring, corrió en Gran Bretaña, pero en Donington Park, corrió en San Marino, pero en Imola, y corrió en Australia, pero en Sidney. Además, el deporte no tenía la masividad ni la difusión de la que hoy goza.
Según datos oficiales, desde 1995 hasta el año 2015, se registraron picos de asistencia de público en distintos circuitos como en el GP de Jerez en 2009 con 263.648 espectadores o el GP de Brno del año 2007 con 245.039.
Incluso en América Latina, el Gran Premio de Argentina marcó su record histórico de asistencia en 2019 con 179.551 espectadores. Además, milones de persona alrededor del mundo siguen cada una de las carreras del calendario a través de las emisiones oficiales.
Lógicamente son múltiples factores los que explican la explosión del MotoGP como un deporte de masas. Sin embargo, los festejos, el carisma pero sobre todo el descomunal rendimiento de VR46 aportaron para que eso suceda y así lo entiende el mismo Valentino.
«Creo que lo más positivo de mi carrera es que mucha gente empezó a seguir el MotoGP para seguir mi carrera desde el principio, y el deporte se hizo más grande, más famoso en Italia, pero también en todo el mundo«, dijo Rossi a periodistas el pasado jueves previo a su carrera despedida en Valencia.
«Es bueno entender que durante mi carrera me convertí en algo diferente, algo así como un ícono«, añadió.
VR46 Academy: semillero de pilotos
El otro gran legado que Valentino Rossi deja tras su retiro profesional es una importante cantidad de pilotos que se perfilan como grandes protagonistas del presente y del futuro.
Cuando Valentino Rossi debutó en el mundial ocho de los pilotos de la actual parrilla de MotoGP aún no habían nacido, entre ellos Fabio Quartararo y Joan Mir, los últimos campeones. El esplendor del oriundo de Tavullia inspiró a muchos de los actuales competidores y los llevó a convertirse en pilotos profesionales soñando, tal vez, algún día ser como su ídolo.
Pero además, Rossi buscó dejar plasmados sus conocimientos y su experiencia en la VR46 Academy. La idea de fundar la academia nació entre 2011 y 2012 con el objetivo de impulsar junto a su amigo, Marco Simoncelli, a los jóvenes talentos de Italia.
Así poco a poco Rossi transformó su famoso rancho de entrenamiento en una escuela de pilotaje y de la cual salieron 3 actuales pilotos de MotoGP: Franco Morbidelli, Pecco Bagnaia y el hermano de Valentino, Luca Marini.
Así fue que en algún momento de la pretemporada 2019, Valentino Rossi fue consultado por la prensa sobre el gran rendimiento que venían demostrando tanto Morbidelli como Bagnaia, a lo “Vale” señaló: “Cuando comenzamos con el proyecto de la academia, con Pecco, con Franco, no esperábamos que llegarían a ponerme en aprietos, no esperaba que nuestros jóvenes pilotos llegarían a pelear conmigo.
«Por un lado estoy preocupado, muy preocupado. Pero por otro lado, estamos muy contentos porque se demuestra que estamos haciendo un buen trabajo en la academia. Así son las cosas, ayudamos a corredores que quizá ahora pueden ganarme, pero ya no podemos dar marcha atrás”, cerró entre risas uno de los mejores pilotos del mundo.
De esta manera fue Valentino Rossi logró cambiar la historia del motociclismo y, aunque ya no se lo vea en los circuitos, su nombre y su legado seguirán sumamente presentes cada fin de semana en que haya acción en MotoGP.