Claudio Castiglioni creó en 1997 la MV Agusta F4 750 junto al famoso diseñador Massimo Tamburini, una radical deportiva que hasta la actualidad sigue en el catálogo de la marca italiana, aunque con distinta motorización.
Por eso, Giovanni Castiglioni, hijo de Claudio y actual responsable de la firma, decidió homenajear a su padre con una Superbike muy especial, equipada con la mejor tecnología de la casa.
La MV Agusta F4 Claudio utiliza el mismo motor que los ejemplares que representan al sello en WSBK, es decir un tetracilíndrico de 998 cc capaz de desatar 212 CV de potencia y 115 Nm de torque. Esas altas cifras están gestionadas por el sistema electrónico MVICS que integra el control de tracción con regulación de torque, antiwheelie, cuatro mapas de entrega de potencia, cambio semiautomático bidireccional, panel de instrumentos digital con GPS y admisión variable, entre otros detalles.
Su carrocería y las llantas fueron fabricadas en fibra de carbono, mientras que su tornillería es completamente de titanio, para elevar la premisa de una moto lo más liviana posible: declara 183 kg, lo que da como resultado una gran relación peso-potencia.
En cuanto a equipamiento, utiliza los sofisticados escapes SC Project de titanio con
configuración 4-2-2 y suspensiones de carrera firmadas por Öhlins (NIX 30 delante y TTX36 detrás).
Una larga lista de detalles, como el asiento específico con unas costuras realizadas a mano y el elefante del logotipo de Cagiva decoran a la MV Agusta F4 Claudio, cuya producción se limitará a sólo 100 unidades.