La decimoquinta edición del premio “Moto Piú Bella del Salone”, que ya es tradicional en el EICMA, fue para la Ducati Streetfigther V4, la naked de la casa boloñesa que recogió el 36,7% de los votos que realizaron cerca de 14.000 asistentes motivados por la posibilidad de ganar una unidad del modelo ganador.
La Aprilia RS 660 con el 14,9% de los votos fue segunda, seguida por la MV Agusta Supervelocce 800, mientras que la Honda CBR1000RR-R SP y la Moto Guzzi V85 TT Travel cerraron el top 5.
La gran cantidad de motos de origen italiano entre los primeros puestos es una tendencia habitual en este concurso. Es más, en sus 15 edición nunca hubo una marca ganadora que no fuera italiana, siendo Ducati la que más veces se llevó el trofeo con 10.
El modelo Streetfighter también había sido distinguido en su anterior camada, más específicamente en 2008, y el revolucionario motor V4 de Ducati también lo había sido en 2017 con la Panigale V4 S. Este año la empresa unió esos dos conceptos “ganadores” para crear una radical naked que puede genera 208 CV de potencia sobre solamente 180 kg; que posee electrónica superbike y una estética realmente única.