Las declaraciones recientes de Markus Flash, director de BMW Motorrad, dieron a entender que la marca bávara está dispuesta a entrar en MotoGP a partir de la temporada 2027. De esta forma, cuando se aplique el cambio de reglamento, la empresa ocuparía un lugar más como equipo de fábrica en el mundial. Ahora dieron otro paso para llegar a concretarlo, comprando datos que dejó Suzuki cuando abandono la categoría reina, valuadas en 18 millones de euros.
Luego de semanas sin tener noticias sobre la posible entrada de BMW a MotoGP, varios medios reportan la compra de datos por parte de la compañía alemana que pertenecían a Suzuki. Entre estas informaciones se encuentran todos los desarrollos de la GSX-RR que la escudería nipona registró hasta su abandono de la competencia en 2022. La transacción hecha por la firma teutona se estima en 18 millones de euros e incluiría los datos de los motores de cuatro cilindros en línea utilizados por los pilotos Joan Mir y Alex Rins.
Cabe recordar la importancia que tiene la ingeniería y la mecánica en el Mundial de Motociclismo, para la construcción de motos verdaderamente competitivas. Además, en BMW fueron a lo seguro, adquiriendo información de una de las monturas más laureadas en su momento. Suzuki obtuvo victorias en dos de sus últimas tres carreras en la categoría, a la vez que consagró al propio Rins como campeón mundial en 2022.
La posibilidad de ver a BMW en MotoGP
Los reportes afirman que la marca bávara estaría realizando un estudio de viabilidad para poder ingresar a la competencia. Los datos comprados servirían para el desarrollo de un motor propio, acorde a las exigencias del campeonato. Es importante destacar que MotoGP experimentó un cambio de reglamento, que entrará en vigor en 2027. La nueva normativa incluirá motores de 850 cc y otros cambios técnicos, como la reducción de las características aerodinámicas y la suspensión de sistemas que bajen la altura de las motos. En ese sentido las características de la GSX-RR de Suzuki podrían marcar un antes y un después en el desarrollo de una futura montura del fabricante alemán. En su momento los de Hamamatsu poseían un motor prodigioso y un chasis que marcaba la pauta dentro de los circuitos.
BMW está dando pasos agigantados para entrar a MotoGP a partir de 2027 si se habla de desarrollo. Demostrando que tiene con que, gracias a su rendimiento en Superbikes, solo faltaría el ‘ok’ de Dorna para tener una sexta marca en el mundial.